La vieja guardia 2, ya disponible en Netflix, empieza con una escena de acción que intenta imitar el estilo de las películas clásicas de espías. Pero se trata de un truco ingenioso para plantear el estilo y el tono de la cinta. Eso, debido a que el argumento, que adapta el cómic homónimo de Greg Rucka es, como su predecesora, una combinación de acción con la fantasía. Algo que queda claro casi de inmediato, cuando el grupo de mercenarios encabezado por Andrómaca/Andy (Charlize Theron) demuestra sus capacidades. Todos pueden soportar las peores heridas y situaciones, sin morir y de hecho, recuperándose casi de inmediatos. Todos a excepción, por ahora, de Andy. 

Por lo que la secuela del éxito de Netflix de 2020, intenta mantener el equilibrio entre ambos géneros y lo logra en la mayor parte de su trama. Además, brindar a su historia un tono más introspectivo, presentando una visión más seria de sus protagonistas. Ese contraste entre la acción y la búsqueda de profundidad permite a la película no solo renovar su premisa, sino avanzar hacia lugares novedosos. Lo anterior, mientras la cinta explora en la posibilidad de la inmortalidad, el paso del tiempo y el sentido de la trascendencia. Temas que La vieja guardia 2 explora, sin perder su capacidad para emocionar y sin duda, mostrar varias de las mejores secuencias de acción del año en streaming

Tanto si viste la primera película y quieres ahondar en su secuela, como si quieres disfrutar de ambas a la vez, te dejamos tres razones para ver La vieja guardia 2. Desde su potencial para convertirse en una franquicia capaz de renovarse en cada entrega, hasta sus fascinantes personajes, parte de la historia universal. Se trata de un recorrido por uno de los proyectos más interesantes de Netflix y además, por su capacidad para volverse una de las producciones más recordadas de la plataforma. 

.

Una mayor exploración del universo original

.

.

Cuando se estrenó La vieja guardia en 2020, sorprendió por cómo combinaba su premisa sobrenatural con una dinámica de grupo bastante terrenal. Algo que la directora Gina Prince-Bythewood logró al brindar al relato fuerza visual sin perder de vista a sus personajes. La secuela cambia de directora y también de prioridades, pero sin perder calidad. Victoria Mahoney toma el timón y opta por un enfoque más lento, que sin afectar las grandes secuencias de la acción, permite explorar en sus protagonistas de forma más efectiva. Más interesante todavía, profundizar en el mundo de los inmortales desde perspectivas distintas.

Por lo que, aunque la historia regresa a Andy y su grupo de mercenarios, también tiene la habilidad de indagar sobre el pasado del personaje. A la vez, en múltiples nuevas historias relacionadas con todas sus experiencias a lo largo de los siglos. La decisión permite a La vieja guardia 2, ser algo más que una película de acción del montón y volverse más parecida al cómic que adapta. En especial, al mostrar todas las posibilidades que la especial naturaleza de sus personajes ofrece. 

.

.

Por lo que esta segunda entrega se compromete con su universo de forma directa. Ya no se trata solo de seguir a un grupo de inmortales a través de misiones modernas: ahora el relato gira en torno a su historia milenaria, su legado, sus reglas internas. El guion, firmado por el propio autor del cómic original, Greg Rucka, en colaboración con Sarah L. Walker, apuesta por ampliar la mitología de estos personajes. De modo que las reflexiones sobre la inmortalidad, el destino o la fragilidad escondida tras siglos de supervivencia son más interesantes —y pertinentes— que en la cinta original.

Nuevos personajes para una trama más compleja

.

.

Uno de los elementos centrales de esta segunda parte es la reaparición de personajes que estaban fuera de juego en la anterior. Andy, que ahora es mortal, debe enfrentarse a su vulnerabilidad en un mundo donde el peligro sigue siendo constante. Pero más allá del riesgo físico, lo que pesa sobre ella es la carga emocional. Quynh ((Veronica Van) una antigua compañera de batalla, regresa con cuentas pendientes y un rencor que ha madurado durante siglos. Esta enemistad se vuelve el eje emocional más potente de la historia. Pero además, en una reflexión profunda acerca del sentido del legado, la herencia personal y la deuda moral. 

Otra figura de interés en La vieja guardia 2 es Discord (Uma Thurman), un personaje de moral gris que se enfrentará al grupo de Andy en cada oportunidad posible. Uno de los puntos más interesantes alrededor del nuevo rostro del elenco, es que muestra uno de los puntos más complicados de la premisa. A lo largo de sus cinco siglos de vida, Discord aprendió lo suficiente sobre la naturaleza inmortal, como para convertirse en fuente de sabiduría para los suyos.

.

.

Pero también, en una villana capaz de usar ese mismo conocimiento para atacar y destruir a los que se lo oponen. Lo cierto es que el personaje interpretado por Uma Thurman es mucho una brújula moral para una tribu capaz de vivir más allá de cualquier sueño humano, imperio o poder mundial. Un rasgo universal que brinda a la cinta una nueva visión sobre su propia mitología y la manera en que desea narrarla. 

.

Un gran elenco para una película compleja

.

.

Charlize Theron sostiene gran parte del peso dramático con la solidez habitual. Su personaje mantiene la fuerza física que ya conocíamos, pero ahora con una dimensión emocional más marcada. Por otro lado, Nile Freeman (Kiki Layne), sigue mostrando una energía feroz. Pero esta vez, tiene oportunidad de evolucionar para volverse más complejo que solo una hábil luchadora y guerrera. 

Al otro extremo, Booker (Matthias Schoenaerts) es un secundario de lujo cuya importancia se vuelve crucial para el final de la cinta. También regresa el agente James Copley (Chiwetel Ejiofor) esta vez el enlace del grupo de inmortales con todo lo que ocurre en el mundo político y judicial. 

.

.

De hecho, uno de los puntos fuertes de la cinta, es retomar a cada uno de los personajes desde un punto de vista más denso. Algo que permite no solo analizar el transcurrir del tiempo — dentro y fuera — de la película, sino la madurez de cada uno de ellos. Un giro que La vieja guardia 2 lleva a cabo con inteligencia, ingenio y como no, dejando la puerta abierta para una continuación.